Shabat 137b - 141b
Estoy con poco tiempo, pero hace rato que no escribía nada en Talmudiando y lo extrañaba. Por suerte en las páginas que leí esta mañana encontré algunos pasajes interesantes para compartir con ustedes y reflexionar.
En este caso, el Talmud dedica algunos pensamientos a la justicia, o mejor dicho a los jueces. En este sentido, el texto va a regalarnos tres frases contundentes:
(1) "Si te encuentras con una generación que sufre mucho ve y revisa los jueces de Israel, ya que toda catástrofe que viene al mundo llega por [la mala praxis de] los jueces de Israel."
(2) "El Santo bendito sea no hace morar Su presencia sobre Israel hasta que se acaben los jueces y policías malos en Israel."
(3) "Jerusalem no será redimida sino por la justicia social."
Lo primero que les pido es que quitemos la cuestión particularista. Es importante entender que el Talmud fue escrito por judíos y para judíos, bajo la perspectiva de que eso era básicamente lo que importaba para el buen funcionamiento de la sociedad. En consecuencia, por ejemplo, el texto se preocupa solamente de los jueces y policías judíos. Sin embargo, creo que podemos extrapolar la enseñanza mucho más allá, a fin de que siga siendo relevante para nuestros días.
Lo que el Talmud nos está diciendo es que no hay cuerpo social que se sostenga si no se respetan las instituciones en general, y el poder judicial en particular. Si vivimos en un contexto en el cual los jueces son comprados y la justicia es mancillada, entonces posiblemente la historia va a terminar mal. Las catástrofes no son, por tanto, los castigos que Ds envía a la tierra para escarmentar por los jueces corruptos, sino que la misma situación generada termina generando la implosión del sistema.
Lo mismo ocurre con la falta de Presencia Divina en un mundo sin justicia. La tradición judía cree que Ds se encuentra siempre en la búsqueda del hombre. Sin embargo, dicho encuentro sólo puede generarse a partir de invertir en una estructura llena de valores y prácticas congruentes. Al parecer, Ds no quiere saber nada con una generación cuyos jueces y policías son despreciables. La otra cara de la moneda implica que si tenemos intenciones de forjar un encuentro con lo trascendente debemos primeramente hacer funcionar a la sociedad como corresponde.
Por último, el Talmud nos recuerda un costado central de la justicia, el cual refiere a la justicia social. No hay forma de redención posible si la sociedad no se dedica a reparar los equilibrios perdidos, procurando dar respuestas concretas a las necesidades de quienes menos tienen y más necesitan. Jerusalem, en este sentido, representa no sólo una ciudad sino todas las ciudades de la tierra: El camino hacia un mundo redimido pasa por nuestra capacidad de desarrollar una relación empática con el prójimo.
En el libro de Deuteronomio (16:20) está escrito: "Justicia, justicia, perseguirás."
Dicho llamado sigue siendo tan relevante en nuestros días como lo fue en tiempos de la Tora y en tiempos del Talmud.
¡HADRAN ALAJ TOLIN!
¡VOLVEREMOS A TI TOLIN!
PD: Entre las páginas 141b y 143a se extiende el capítulo 21 del Tratado de Shabat. Como en esta oportunidad no encontré nada que me inspirara a escribir un post, renuevo la frase que decimos al finalizar cada capítulo talmúdico:
¡HADRAN ALAJ NOTEL!
¡VOLVEREMOS A TI NOTEL!
Sin justicia ningún proyecto social puede ser posible, ya q la justicia debe tender a anular el rencor en las víctimas y sus allegados , y debe educar a la gente en lo q es correcto; d ésta manera se podrá ejercer el justo razonamiento d las circunstancias q nos toca vivir y hallarles el punto d superación.
ResponderEliminarDe otra manera los q gritan a voz en cuello contra los delincuentes y criminales luego terminan votando y revotando a los K, a Macri, a Duhalde, a de Narváez, a Scioli, a Juez, a Insfrán, etc, o sea, lo mismo q están denostando.